—Lo siento, Phi. No sólo estabas en peligro, sino que ni siquiera pudimos tomárnoslo con calma y comer en paz...
—No te preocupes por eso. Tú mismo lo dijiste, es su culpa... ¡No importa eso, es realmente increíble lo bueno que eres con el Blaster! ¡Disparar una bala mágica cuando ni siquiera la has tenido un día entero sólo demuestra lo genial que eres!.
Después de ese incidente, compraron pan, y se deleitaron con un almuerzo tardío lejos de las miradas de los demás en la actual residencia de Yuugo, un rincón del patio.
Mientras se animaban mutuamente, Phi cambió de tema elogiando a Yuugo por su duelo de antes, con un tono emocionado.
Yuugo se limitó a sonreír vagamente, sin entender realmente lo genial que era, pero entonces preguntó algo que le rondaba por la cabeza.
—Phi, ¿esta armadura es realmente un modelo antiguo? Entiendo que no ofrece una defensa perfecta, pero si puede vencer a alguien que usa una armadura similar de un solo golpe, ¿no es realmente buena?.
—No. Las armaduras que cubren todo el cuerpo son débiles de todos modos, y la Blaster es una fabricada en serie que se desarrolló hace décadas.
—¿Eh? ¿En serio? Es tan guay, y parece que ofrece tanta protección. ¿Por qué la gente lo ve así?.
Yuugo se sorprendió al oír que las armaduras completas eran débiles, pero obtuvo una respuesta adecuada cuando preguntó.
—Sí, tienes razón, los objetos mágicos de tipo armadura completa tienen poder defensivo, pero... No es en absoluto un aumento drástico. Los aprendices de caballero mágico entrenados pueden mejorar sus habilidades físicas a través de la energía mágica de todos modos, e incluso pueden crear muros de energía mágica para defenderse.
—Eso no es tan diferente de llevar una armadura en términos de dureza, y te permite moverte más libremente, así que realmente no hay ninguna necesidad de llevar una armadura pesada, ¿verdad?.
—Sí, supongo que tienes razón... Pero el desarrollo de objetos mágicos sigue avanzando, ¿no? Entonces, ¿por qué no crear un nuevo objeto mágico tipo armadura que sea a la vez de metal resistente y ligero?.
—Tienes que amasar energía mágica en el metal para hacerlo resistente y flexible, y luego incrustar cristales mágicos para transmitir energía mágica a través de él... Si comparas la fabricación de una espada y una armadura con este proceso, la primera lleva mucho menos tiempo y materiales. No es adecuado para la producción en masa, e incluso si sólo estuvieras haciendo un objeto mágico único, sería mejor hacer varios al mismo coste que ese.
—Y luego está la diferencia en cuanto a su utilidad real. Blaster puede infundir energía mágica en los brazos y las piernas, pero no tiene más funciones. Si tienes que usar otros objetos mágicos para atacar, llevar la armadura no tiene sentido, ¿no?.
—...Gracias por la explicación, pero siento que me acaban de golpear con una triste realidad...
—No es que los tipos de armadura completa estén completamente extintos. Hay tipos de armadura completa que han pasado de generación en generación a través de familias notables.
Los héroes henshin son geniales, pero en un mundo en el que la gente puede ser fuerte sin transformarse, la eficiencia tiene prioridad sobre lo genial.
El corazón de Yuugo se sintió herido por la realidad que no podía preocuparse menos por sus sueños, y lanzó otra pregunta al hermano pequeño que le consolaba.
—Phi... ¿Por qué eres tan amable conmigo? Quiero decir, soy la persona más odiada de esta academia, ¿verdad? ¿Por qué eres tan bueno conmigo?
—...Porque te lo debo. Puede que no lo recuerdes porque perdiste la memoria, pero fuiste la primera persona que fue amable conmigo en esa casa...
Realmente no había pasado mucho tiempo desde que Yuugo se reencarnó, pero notaba demasiado bien lo mucho que lo odiaban todos a su alrededor.
Así fue en el dormitorio, y también recibió muchos insultos durante el duelo. Y aunque Marcos tenía sus propios problemas, estaba claro por sus acciones y palabras que él tampoco le caía bien.
Sólo Phi lo trataba con cariño.
Y después de que Yuugo le hiciera directamente la pregunta que le rondaba por la cabeza desde el día anterior, su hermano pequeño respondió en voz baja.
—Mi cuerpo es débil, y soy un hijo bastardo. Y como nací sin el talento para ser un caballero mágico, me consideran un fracasado. Tanto mi madre como mi padre me trataron con frialdad por ello, y eso me hizo pensar que yo tampoco valía nada. Pero tú cambiaste eso.
—¿Lo hice?
—Sí. Me dijiste que aunque no tenga talento para ser un caballero mágico, sí lo tengo para ser un investigador. Me dijiste a mí, el hijo de una concubina, que una vez que heredaras la casa, me convertirías en tu mano derecha. Me alegró tanto oír eso... Me alegró tanto oír que alguien me reconocía.
—Es porque tengo una meta, ser tu mano derecha, en eso he estado trabajando duro. Por eso entré en la academia Luminous. Si no fuera por ti, seguiría en casa, de rodillas, sin un lugar al que pertenecer. Gracias a ti puedo estar agradecido de estar vivo.
Yuugo miró directamente a Phi, mientras respondía a su pregunta reflexionando sobre sus circunstancias y su pasado.
Lo que Yuugo vio en sus ojos fue una confianza y seguridad inquebrantables, mientras Phi continuaba, con una sonrisa en la cara.
—Estuviste genial. Fue genial cómo dijiste que no perderías en absoluto, y luego saliste ahí y ganaste de verdad. Siempre creeré en ti. Eso significa que siempre ganarás, ¿verdad? Incluso en esta situación difícil, incluso mientras la gente a tu alrededor se burla de ti, no puedes perder, porque yo creo en ti.
—Phi...
Yuugo tragó saliva, mientras le conmovía que su hermano pequeño dijera que la gratitud del pasado significaba que seguiría creyendo en él, aunque todos a su alrededor le llamaran la peor de las escorias.
Se sintió fortalecido por la mirada de su hermano pequeño, que creía que no perdería ante aquella dura situación y que se labraría un nuevo futuro.
Yuugo sonrió, acarició la cabeza de su hermano y habló.
—Sí... Entonces yo tampoco puedo desanimarme. Seguiré adelante, para ser un hermano mayor del que puedas estar orgulloso.
—Estoy seguro de que lo estarás. Te lo garantizo. No eres la más baja de las escorias. ¡Eres un héroe para mí...!
Sólo había pasado un día desde que Yuugo se reencarnó en aquel mundo, y sinceramente, no había pensado en lo que iba a hacer allí.
Pero... Quería estar a la altura de las expectativas y satisfacer la confianza de su hermano pequeño, que tan inocentemente creía en él.
Aunque lo perdiera todo y tuviera que empezar de cero, creía que podría volver a levantarse. Yuugo volvió a acariciar suavemente la cabeza de su hermano y sonrió.
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